Share

Negro y Los Colores: “Vamos a ser la influencia para que otros se atrevan”

Con 12 integrantes y un enfoque horizontal, la banda apuesta por una industria sin jerarquías, donde la improvisación guía la creación.
By Natalia Merced
mayo.23.2025

Durante más de una década, José “Negro” González y Joey Oyola se cruzaban en eventos musicales y siempre flotaba la idea de hacer un proyecto juntos.

Joey, trombonista y productor, conoce muy bien la vida de un músico de bandas. Tras haber tocado con agrupaciones como Los Cafres, Cultura Profética y Gomba Jahbari, tenía claro qué funcionaba y qué necesita modificarse.

Negro, por su parte, vivía una situación similar, pero con el peso de ser solista. Como rapero, sentía esa responsabilidad de cargar con la energía del escenario, ser la cara del show y ocuparse del manejo, darlo todo por muy poco. Quería sentir en la tarima la energía compartida de una banda y tenía la experiencia para visualizar algo verdaderamente transformador.

El desgaste emocional y creativo los trastocó. Negro consideró hasta retirarse, pero el sueño de crear un proyecto que cambiara las reglas del juego, que fuese más grande que él, seguía latente.

Así que en 2022 –el 8 de diciembre, para ser exactos– nació Negro y Los Colores en un grupo de WhatsApp. En ese momento, solo estaban Negro, Joey, el bajista Javo Grant y el saxofonista Héctor Mario. Aunque estos últimos ya no tocan con la banda.  

Negro y Los Colores mezcla el hip-hop con el jazz, soul, funk, reggae y rock.
La agrupación espera lanzar su primer álbum este año. (Suministrada)

Con el tiempo, se unieron músicos con trayectorias diversas: el productor y guitarrista Rafa Rivera, la percusionista Nubia García, el saxofonista Ángel Herrero y la bajista Sofía Ramos. 

El rundown lo completan Camilo Pentzke –pianista y productor–, Max Alfonso –guitarrista y MC–, Jan González –baterista, rapero y productor– y las coristas Nathalie Delgado, Yeidimar Ramos y Débora Carreras. A veces, Frido Vargas también colabora en el bajo. 

¿El resultado? Una propuesta que combina el hip-hop con el jazz, soul, rock, funk y reggae. Los versos y los malabares liricales que suelta Gónzalez van cargados de mensajes de reflexión social. Las voces de las coristas, que pertenecen al conjunto Quimera, acentúan la proeza musical con sus coros y vocalizaciones que rememoran el R&B y el soul. Es música en comunidad. 

“Ahora, siento que tengo la dicha de tocar en una banda donde hay [otras] once personas que están al 100 % de sus capacidades artísticas”, destacó Negro.

No hay jerarquía

Más que una nueva agrupación, es un experimento de transformación en la industria.  Apuestan por un espacio horizontal. Todos, sin importar su nivel de experiencia, tienen la misma responsabilidad y derecho a decidir.

No existe la jerarquía, ni las malas ideas. No hay espacio para egos. Y la improvisación es un elemento clave para la producción. 

Las coristas Nathalie Delgado, Yeidimar Ramos y Débora Carreras, también conocidas como QUIMÆRA. (Suministrada)

Los doce cerebros se unen en el estudio de Joey, en Salinas, y echan al caldero sus influencias e ideas. En poco tiempo, comienza a burbujear la línea sonora y la composición toma su rumbo. Lo ven como un proceso muy orgánico, en donde sus integrantes —que rondan entre los 22 y 39 años— ponen en práctica sus poderes. La meta es que todo el mundo brille y esa colaboración rica en vertientes musicales se traduzca a un público diverso. 

Un bien común

Negro y Los Colores sirve como una escuela para músicos que aún están encontrando su rincón en la industria. Trabajan para avanzar el éxito de la banda y priorizan el darle forma al proyecto, siempre pensando hacia el futuro.

Como padrinos, Joey y Negro se encargan de cuidar a sus compañeros, sacrificando lujos por el bien colectivo. “En los shows, nosotros, a veces, lo que tomamos es una o dos botellas de agua, pero nos aseguramos que los muchachos tengan muchos refrigerios. Siempre le decimos a los fotógrafos que tomen fotos de toda la banda, no solo a mí”, comentó el rapero. Buscan constantemente que los demás tengan visibilidad, que consigan mejores oportunidades y, si la banda es solo un trampolín para algo más grande, que así sea. 

Al ser independientes, tienen la libertad de decidir cuáles serán sus reglas de juego. Eligen el enfoque, el sonido, las prioridades y el próximo paso.

Sus perspectivas de vida las llevan a cada canción, post en Instagram, presentación en vivo. No hay nubes de humo ni rodeos. No solo buscan una industria musical diferente, sino un Puerto Rico más justo, libre y sostenible.

Por ejemplo, el tema “Agua e’ Coco” subraya una mentalidad colectivista. Sus versos hablan de solidaridad, del trabajo en comunidad y de alimentarnos entre nosotros. Sirve como himno para lo que representa la propuesta de la banda. “Comida orgánica, música orgánica”, sostuvo Negro. De hecho, en el video musical, le dan protagonismo a tres fincas agroecológicas del archipiélago.

Entienden que su propuesta musical se vuelve más grande y cobra importancia cuando usan su espacio para visibilizar lo que está pasando a su alrededor, aquello que los identifica.

“Naturalmente, nos nace hacerlo y es lo que vivimos cada día en la banda”, añadió Joey.

Un antes y un después

Otro aspecto que los define es el atrevimiento. “El proyecto que nadie quiere hacer, nosotros lo queremos hacer”, puntualizó Negro. 

En momentos donde prima la individualidad, ellos organizan una agrupación de doce personas. Se atreven a improvisar en sus presentaciones porque tienen una confianza natural que se desprende de cada decisión que toman. Y su primer álbum se compone de sesiones en vivo que grabaron en el estudio, evidencia de la seguridad que depositan en sus músicos.

Esas cualidades los han preparado para esta próxima etapa. Actualmente, están en la producción de su próximo disco. Vienen con hambre para comerse la escena musical y con un sonido que describen como global y alternativo. Se han encargado de crear con amor y respeto a la música, buscando capturar la calidez y organicidad de una banda unida en el estudio. 

Se vislumbran creciendo aún más. Afirman que hay espacio para más músicos. Más vientos, más cuerdas, más percusiones, no hay límites. Negro y Joey se acercan a la banda como su proyecto de vida, depositando todas sus energías en verla crecer. 

“En un momento donde nadie hace bandas, nosotros lo hicimos. Pienso que cuando este proyecto explote, va a ser un antes y después de las bandas y [de] la música también. Vamos a ser la influencia para que otros se atrevan. Vamos a abrirles esa puerta”, aseguró el rapero. 

Picture of Natalia Merced

Natalia Merced

Publicidad

Explora más

3 eventos con música en vivo que no te puedes perder

4 artistas egresados del programa Berklee en Puerto Rico que debes conocer

David Rivera: “Lo lindo es combinar y hacer música con libertad, eso es todo”

Hola, somos El Track

Fofé: “No soy un personaje fabricado. Soy tal cual”

5 canciones de la escena musical boricua que debes escuchar

RaiNao repasa su carrera artística

RaiNao: “Mi propósito de vida es mejorar este mundo con arte”