Eran cerca de las 8:00 p.m. cuando decenas de personas tomaron sus sillas. Es un jueves en el Centro de Bellas Artes de Santurce y está claro lo que se anticipa: una pura descarga musical a manos de músicos boricuas egresados del programa de Berklee en Puerto Rico, una iniciativa académica que organiza la entidad Make Music Happen en colaboración con la prestigiosa Berklee College of Music. 

En la antesala al concierto, Luis Álvarez Fiol, fundador de Make Music Happen, subrayó su misión de impulsar la accesibilidad a la educación musical y el orgullo que siente de conmemorar 30 años de éxito del programa. “Se celebra la dedicación y el compromiso con la excelencia.”, sostuvo. 

Lo siguió el presidente de Berklee College of Music, Jim Lucchese, quien enfatizó la importancia de apoyar el crecimiento musical en Puerto Rico. “Puerto Rico está entretejido en el alma de Berklee College of Music”, declaró Lucchese. Además, destacó la huella que han dejado los estudiantes puertorriqueños en la riqueza musical de la institución. 

Sin más preámbulos, dio inicio el tan esperado concierto. 

Los primeros en treparse a la tarima fue David Rivera y La Bámbula. La agrupación interpretó el tema “Vaya con Dios”, una salsa alegre que estableció el tono de la noche: júbilo, orgullo y pasión. En el escenario, el baterista estuvo acompañado de un conjunto de nueve músicos, entre ellos el flautista Kalani Trinidad, los percusionistas Marcos López y David Antonio Rosado y la bajista Krystal Santana. 

Luego, el concierto tipo festival, siguió con la cuatrista y cantautora Fabiola Mendez y su cuarteto con una interpretación deslumbrante de su tema original “La tierra es una mulata”. La voz dulce de Fabiola acariciaba nuestros oídos mientras manejaba su cuatro con una agilidad admirable. La intérprete estuvo en tarima con los músicos Aldemar Valentín, en el bajo; Francisco Alcalá, en la batería; Marcos López, en las congas; y David Antonio Rosado, en la percusión menor. 

Durante la velada, figuras como Nannette Vélez, directora general de Programas y Medios Digitales en la Latin GRAMMY Cultural Foundation y Rubén Amador, fundador del Conservatorio de Artes del Caribe, compartieron sus testimonios. En sus discursos se destacó la huella colosal que ha marcado Berklee tanto en sus carreras profesionales como en el panorama actual de la música. 

Las presentaciones continuaron con el Legacy Faculty Band—agrupación compuesta por miembros de la facultad de Berklee—en donde las congas del maestro Eguie Castrillo acapararon el teatro y fueron recibidas con un aplauso ensordecedor. 

El saxofonista Jonathan Suazo fue el siguiente en el repertorio con su composición titulada “La magia”. Un tema a la altura de su nombre, destacando el talento de Suazo en el saxofón alto y rico en percusión con López y Rosado tocando los barriles de bomba.

Le siguió el Puerto Rican Quintet, una banda constituida por músicos que formaron parte de las primeras clases de Berklee en Puerto Rico. Luego tomaron el escenario profesores de la edición actual del programa, los cuales interpretaron dos temas, titulados “To Wisdom the Prize” y “Cara de Payaso”. 

Miguel Zenón fue uno de los actos más esperados de la noche. El reconocido saxofonista tocó su composición titulada “Revelation”, acompañado por Valentín, en el bajo; Alcalá. en la batería, López, en los timbales y Rosado, en las congas. Su interpretación fue una verdadera revelación. Su dominio sobre el saxofón alto cautivó a la audiencia quienes, al finalizar, se desbordaron en gritos y aplausos.  

Acercándose al cierre, el público no pudo esconder su júbilo al entrar a tarima el músico y cantante Millo Torres, quien, junto a otros 13 músicos, interpretó su popular tema, “Haciendo Tempo”.  

El entusiasmo continuó con el conjunto liderado por el saxofonista Edmar Colón y su interpretación de “Soñando con Puerto Rico», una composición clásica de Bobby Capó.   

Luego, el flautista y cantante Jeremy Bosch, con su voz sedosa, acaparó la atención del público al interpretar el tema de su autoría “Ya no me duele”. 

En un intermedio, la música tomó una pausa cuando Álvarez Fiol fue galardonado con el “Berklee Alumni Achievement Award”, por sus esfuerzos para crear oportunidades para músicos jóvenes en Puerto Rico. 

Al culminar la premiación, la música siguió con el gran cierre de la noche: la Big Band de Berklee en Puerto Rico, organizada para conmemorar el trigésimo aniversario del programa. La banda contó con tres secciones de vientos y una amplia diversidad de percusiones y cuerdas. La armonía sonora irrumpió la sala con ímpetu y nos deleitó con cinco temas: “Yo no sé qué será”, “Isotope”, “Polita” —en el cual se unió la timbalera Zayra Pola—, “Estoy como nunca” y “Nutville”. 

Llegada la medianoche, en el Centro de Bellas Artes solo se respiraba regocijo. Fueron alrededor de tres horas de música, de pasión y orgullo.